Necesitamos el colesterol

jueves, 3 de marzo de 2011

El colesterol es una de las formas de grasa que circula en el organismo y se deposita en los vasos sanguíneos impidiendo una buena circulación. Tiene dos orígenes: uno producido en el propio organismo y otro que se obtiene a través de los alimentos (especialmente los de origen animal como las carnes rojas, la leche entera,  el queso, los embutidos y las yemas de huevos).

¿Necesitamos el colesterol? La respuesta es sí. Y es una afirmación rotunda, porque el colesterol es indispensable para la vida, pues participa en la formación de las hormonas de la corteza suprarrenal y de las glándulas sexuales, los ácidos biliares (necesarios para la digestión), las membranas celulares y la vitamina D. El problema no es que tengamos colesterol, la condición de riesgo para el sistema cardiovascular se presenta cuando existe exceso de colesterol “malo” en sangre.

Cuando el organismo produce demasiado colesterol o lo absorbe en exceso de los alimentos que se ingieren, esa cantidad extra se deposita en las arterias como placa y origina lo que se conoce como ateroma (placa ateromatosa arterial) que se constituye en origen de numerosas enfermedades cardiovasculares (ECV) entre las que se cuentan los temidos accidentes cerebrovasculares, trombos e infarto del miocardio.

Riesgo individual
Las características personales y familiares, así como el estilo de vida  inciden directamente en los riesgos de padecer ECV de cada persona en particular. En el área de prevención cardiovascular se clasifican los factores de riesgo cardiovasculares entre los que se pueden modificar y los que no.

Los que no se pueden modificar son: antecedentes de ECV, la edad, el sexo (los hombres son más propensos a sufrir ECV a cualquier edad mientras las mujeres después de la menopausia) y la predisposición genética.

Los modificables son: hipertensión arterial, dislipidemia, diabetes, tabaquismo, sedentarismo, obesidad, hipertigliceridemia (altos niveles de triglicéridos).

Si bien algunos de los factores de riesgo modificables representan trastornos crónicos para la salud, la medicina actual cuenta con la terapéutica apropiada para mejorar cada condición y disminuir el impacto de las ECV. Para la hipertensión y la dislipidemia se debe tomar medicación contínua.

0 comentarios:

Publicar un comentario